Un grupo de 12 vecinas de la comuna de Quintero recibió su certificación el 6 de febrero, tras completar con éxito el curso “Técnicas de Repostería para personas con necesidades alimentarias especiales”, dictado por la OTEC Nahuén Capacitación Limitada. Esta iniciativa fue impulsada por el Programa Mujeres Jefas de Hogar de la Municipalidad de Quintero, en colaboración con el Servicio Nacional de la Mujer y la Equidad de Género (SernamEG).
Esta capacitación, viene a reforzar el compromiso del alcalde Rolando Silva Fuentes y los programas sociales del municipio, para facilitar el empoderamiento económico de las mujeres de la comuna, brindándoles herramientas para mejorar su calidad de vida y la de sus familias
El curso, que se enmarcó en el desarrollo de proyectos laborales de las beneficiarias, entregó conocimientos teóricos y prácticos para la preparación de productos de repostería adaptados a personas con necesidades alimentarias especiales, como diabéticos, celíacos y aquellos con alergias a la proteína de la leche de vaca, entre otros. Las participantes aprendieron a crear opciones dulces y saladas, garantizando preparaciones seguras, deliciosas y alineadas con las restricciones dietéticas correspondientes.

María Elisa Vergara Poveda, coordinadora del Programa Mujeres Jefas de Hogar, destacó la importancia de esta capacitación: “En esta ocasión participaron 12 mujeres de la cobertura 2024, y esta capacitación se enmarca en el desarrollo e implementación de sus proyectos laborales. Cada una de las mujeres que hoy recibe su certificado tiene una trayectoria vinculada al rubro alimenticio, por lo que fueron seleccionadas para participar en esta formación aquí en la comuna”.

Por su parte, César Santander, subgerente de la OTEC Nahuén, expresó su satisfacción por el desarrollo del curso: “Para nosotros es muy gratificante que este tipo de capacitaciones se realicen en Quintero, una comuna pionera en la región de Valparaíso en esta temática. Además del curso de repostería, las certificamos en manipulación de alimentos, lo que les brinda un plus para insertarse en el mercado laboral, ya sea en restaurantes o en cualquier lugar donde se requiera personal capacitado en estas técnicas”.

Una de las participantes, María Leiva Ordenes, de 74 años, compartió su experiencia: “Estoy muy contenta por haberlo logrado. Fue un gran sacrificio a mi edad, pero conocí nuevas experiencias. El profesor fue muy paciente, ya que yo no sabía mucho y me explicaba una y otra vez. A esta edad, uno casi no quiere participar, pero yo me atreví. Aprendí a hacer dulces para personas con necesidades especiales, y eso me llena de orgullo”.
Finalmente, además de la certificación en repostería, el curso incluyó la certificación en Manipulación de Alimentos, bajo la Norma Chilena de Calidad NCh2728:2015, reconocida por SENCE. Como apoyo adicional, cada participante recibió un kit de herramientas de repostería, que incluyó un mandil de cocina y una batidora manual, elementos que les permitirán continuar desarrollando sus habilidades en sus hogares o emprendimientos.