Más difusión de los programas municipales y sectoriales  para atender situaciones de discapacidad de las personas y una locomoción pública que muchas veces los discrimina,  fueron las mayores debilidades que aparecieron en  este diagnóstico.

Sin embargo, hay también en la comuna muchas fortalezas  que fueron destacadas por las personas con y sin discapacidad, que participaron en este estudio, como  el hecho que  existiera  una oficina  encargada de apoyarlos con ayudas técnicas, con talleres, con insumos y con salas de recuperación para 90 niños, entre otras acciones.

El kinesiólogo Luis Faúndez, coordinador del programa Estrategia de Desarrollo Local Inclusivo, EDLI,  presentó los resultados a representantes de los distintos departamentos municipales, realizados en la península, Loncura y la zona rural entre los meses de diciembre y marzo;  en el diagnóstico participaron  164 personas, de entre 18 a 69 años, que representaron  a  un 46 por ciento  de la zona urbana, 27 de Loncura y 27 de la zona rural.

 La oficina de la discapacidad elabora en la actualidad un mapa con requerimientos inclusivos, y trabaja en un programa que apoye los emprendimientos y las necesidades laborales con una cooperativa inclusiva y ferias de emprendimiento  para unas 80 personas que han manifestado interés en participar de esta iniciativa. Junto con ello, y dado los planteamientos que surgieron en el trabajo participativo, se realizarán mayor difusión y capacitación a la comunidad.